Dijo la rama ausente:
A mi me susurran las estrellas
sus querellas
Y me habitan los pájaros nocturnos,
de mi emerge la savia urente,
que no de otros mundos.
Vi crecer el mar y pasar los inviernos
y las primaveras,oculta secreta...
Y no he padecido en infiernos
privada de la vida,
porque he aprendido a brindar mis fuerzas
sin destino
y a soñar estremecida.
En mi, las alas de las mariposas muertas
y en mi todos los pétalos yertos
Trepido y crepito en las raíces y sostengo el universo,
y sobre mi ausente estructura
se conjuga un concierto de besos.
Entonces gimen mis invisibles brazos
con infinita ternura!
2 comentarios:
que belleza querida Mia, un poema hondo y sentido, las amputaciones nos obligan a desarrollar habilidades en los otros miembros y en los otros sentidos, o mejor dicho , a redescubrir los potenciales dormidos
besitos y feliz fin de semana
El alma sufre a veces ciertas mutilaciones y hay que inventarse sistemas de sobrevida....
Besos amiga del querido Chile!
Feliz fin de semana para ti también!
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